Una de las enfermedades más frecuentes en las mujeres es la aparición de nódulos en las mamas o bultos en los pechos.
Los primeros síntomas son las molestias, hichazón, inflamación de la mama o retracción del pezón. Por ello ante estos signos iniciales se debe consultar con un médico para que realice un diagnóstico certero. Es probable que os pregunten por antecedentes personales, historia ginecológica y obstreticia para poder abordar el motivo de la aparición de dicho nódulo. También se procede a un examen físico de exploración para localizar su ubicación, determinar su tamaño, forma, consistencia, etc.
Por último, se recurren a exploraciones complementarias como la biopsia para determinar su naturaleza.
Respecto a su tratamiento, éste depende del diagnóstico previo aunque puede ir desde medicamentos hasta la operación quirúrgica.
Uno de los datos más curiosos que la mayoría de las personas desconocen es que la presencia de estos nódulos también puede estar presente en los varones. Si bien es cierto que es menos frecuente, las posibilidades existen.
Para diagnosticarlo de forma eficaz se debe realizar una autoexploración por el propio paciente que permita descubrir cualquier anomalía o alteración de las glándulas mamarias en forma de nódulos o incluso retracciones.
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